Pasan a disponibilidad al jefe del policía asesinado en Eldorado
La Policía de Misiones enfrentó un duro golpe institucional tras el homicidio del Cabo 1º Mauricio Miñarro, encontrado muerto de un disparo en el pecho en el destacamento de la División de Infantería del kilómetro 11 de Eldorado. Este trágico hecho no solo conmocionó a la comunidad local, sino que también expuso graves fallas operativas dentro del puesto policial.
Como respuesta inmediata, el jefe de la División de Infantería de la Unidad Regional III, Ricardo Andrés Arrúa, fue separado de la fuerza. La decisión se tomó tras confirmarse serias irregularidades en la gestión del destacamento, incluyendo la ausencia de registros en el libro de órdenes del día y el incumplimiento de protocolos que exigen la presencia de tres agentes en el lugar. Miñarro, al momento del incidente, estaba solo y sin su uniforme reglamentario.
Según informó la Policía de Misiones, también se investiga un posible faltante de armamento en el destacamento, aunque este punto aún está bajo revisión. La Dirección de Asuntos Internos intervino de manera inmediata para llevar adelante una auditoría y esclarecer las responsabilidades administrativas vinculadas al caso.
El homicidio, que fue caratulado como tal por la justicia, generó diversas especulaciones en redes sociales, incluyendo la teoría de un “ataque comando”. Sin embargo, las autoridades descartaron esta versión al no encontrar indicios que la respalden, enfocándose en los elementos locales que rodearon el hecho.
El despido de Arrúa se suma a otras medidas tomadas por la Policía de Misiones en su compromiso por esclarecer el caso y recuperar la confianza de la comunidad. Mientras continúa la investigación judicial, las autoridades se han comprometido a determinar tanto las responsabilidades administrativas como las penales para dar una respuesta contundente a este trágico suceso.
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