Según Stelatto, los ciudadanos suelen pagar esta tasa al estar incorporada en la factura de luz, pero fuera de este sistema es poco probable que los contribuyentes asistan al municipio para abonarla de manera independiente.

En la misma línea, Carlos "Kako" Sartori, intendente de Campo Grande y presidente de la Comisión de Desarrollo Estratégico e Integral de los Municipios (CODEIM), expresó que esta medida supone un avance sobre la autonomía de los municipios. Destacó que, en el caso de los municipios que dependen de Emsa (Energía de Misiones), la única tasa que se cobra es la de alumbrado público, la cual no genera ingresos directos para el municipio, sino que compensa el costo del servicio energético consumido.

Además, los intendentes se enfrentan a la posibilidad de tener que incrementar la tasa de alumbrado para cubrir los crecientes costos operativos, lo que implicaría que los concejos deliberantes autoricen a las prestatarias a aplicar dicho aumento. Sin embargo, la preocupación principal radica en cómo los municipios podrán sostener el servicio sin la incorporación de la tasa en las boletas, ya que su eliminación podría derivar en cortes de alumbrado y afectar la seguridad y calidad de vida en los barrios.

Este panorama abre un nuevo desafío para los municipios de Misiones, que deberán buscar alternativas para mantener sus servicios esenciales en medio de un escenario financiero complejo.