De los 3.107.874.111.000 pesos destinados a inversiones y gastos en 2025, las áreas Salud (23 por ciento), Bienestar Social (21,1 por ciento) y Cultura y Educación (25,3 por ciento) concentran en su conjunto el 69 por ciento del total, que equivale a un monto de 2.137.148.058.000 pesos.

El gobernador destacó que “priorizando la Inversión Social ratificamos nuestro pensamiento que la verdadera inclusión, la real igualdad de oportunidades es la que brinda la educación, y por eso, apostamos decididamente a ella”.

El ministro de Hacienda, Adolfo Safrán, aseguró que se trata de una propuesta netamente misionera, sin esperar recursos nacionales para financiar planes y programas, con excepción del Fondo Especial del Tabaco (FET), que es intangible por ley nacional y le corresponde a Misiones como a las demás provincias tabacaleras.

Safrán reveló que “las únicas partidas que aparecen en el presupuesto provincial que contienen remesas o fondos nacionales son el Fondo Especial del Tabaco, que todavía continúa, y algunas obras nacionales que se prevén que pueden llegar a ejecutarse con fondos nacionales. Pero realmente el monto es poco significativo. No representa un monto relevante en materia del presupuesto global la presencia de fondos nacionales”.

Sobre la cifra de 3,1 billones de pesos estimados para el funcionamiento del Estado provincial, aclaró que “es un número muy elevado pero, con el signo monetario que tiene la Argentina, hoy en la práctica no lo es tanto”.

En esa línea, confirmó que para el proyecto de presupuesto se tomaron en cuenta algunas pautas económicas que el presidente Javier Milei remitió al Congreso el mes pasado, a modo de anticipo de los lineamientos que tendrá el proyecto nacional de recursos y gastos que se espera para septiembre. “Por ejemplo, para este informe que se llevó al Congreso se pensaba en un dólar a fin de año de 1.016 pesos y una caída en la economía del 3,5 por ciento que sirven para conocer cómo podría ser el presupuesto nacional 2025”, expuso Safrán.

Más allá de los números pensados para el próximo ejercicio, las urgencias actuales siguen en sintonía de los vaivenes de la economía. Varios sectores siguen reclamando por aumentos salariales y mantienen una constante tensión con el gobierno provincial.

Al respecto, Safrán advirtió que “vemos que en estos últimos tres meses, desde mayo hasta la fecha, se está visualizando una fuerte desaceleración de la tasa de inflación, y esto se refleja en la recaudación. La coparticipación de julio va a terminar siendo prácticamente igual o un poco menor que junio. Tiene que ver con este proceso de ralentización de la inflación que se ve y forma parte de la pauta con la que se trabajará en materia salarial el mes que viene”.

Respecto a las previsiones, el ministro señaló que “siempre tenemos la esperanza de que la economía se recupere, de que tengamos un año 2025 positivo y de crecimiento, pero los números más precisos los tendremos seguramente en septiembre”.

Por otro lado, las asimetrías entre Misiones y el resto del país se mantienen al igual que los últimos años. Esto se volvió a notar con los aumentos en los combustibles que inauguraron el mes.

Con la nueva actualización, la nafta súper en Buenos Aires cuesta 969 pesos, mientras que en Misiones subió a 1.139 pesos, 170 pesos de diferencia. La Infinia, en Capital Federal cuesta 1197, mientras que en Posadas cuesta 1.358, con una diferencia de 161 pesos por litro.

En la era Milei, los combustibles aumentaron 134,8 por ciento. Llenar un tanque en diciembre para los misioneros costaba 26.675 pesos, mientras que ahora hay que pagar 62.645.

Uno de los pocos sectores que de a poco muestra una recuperación es el de la construcción. Misiones se posiciona entre las seis provincias que tuvieron incrementos moderados en el desempeño del empleo sectorial a nivel provincial con el 0,7 por ciento, según un informe de la Consultora Politikon Chaco.

Esto se tradujo también en un ligero repunte en la venta de materiales para la construcción, después de tres meses a la baja. La reactivación de varias obras paralizadas por la Nación (y retomadas después de los acuerdos entre la Renovación y Milei) trajo algo de alivio a todo el sector en un año muy complicado.