El crimen ocurrió cuando Camargo, aparentemente, reparaba la motocicleta del principal sospechoso, un joven de 21 años detenido en la vivienda de su hermana en San Antonio. Un testimonio clave indica que ambos discutieron por cuestiones laborales un día antes de que apareciera el cuerpo de Camargo, y que el sospechoso lo amedrentó con dos armas de fuego.

En el allanamiento realizado en la vivienda del sospechoso, las autoridades secuestraron una escopeta, que no sería el arma homicida, pero confirma que el detenido tenía acceso a armas de fuego.

Además, se incautaron cinco dispositivos electrónicos, incluyendo un celular oculto en el baño que podría pertenecer a la víctima. También se encontraron chapas patentes de motocicletas posiblemente robadas, sugiriendo una red de robo y venta de motocicletas en el mercado informal de Brasil.

Efectivos de la Dirección Homicidios y de Investigaciones de la UR-XIV de San Pedro están a cargo de las pesquisas. Todo el material secuestrado será sometido a pericias por la Policía Científica, incluyendo la ropa del sospechoso y la motocicleta con la que presuntamente se trasladaron.

La autopsia reveló que dos disparos fueron realizados en la parte parietal derecha de la cabeza de Camargo y los otros dos en el lado opuesto, uno de ellos a la altura de la oreja. Solo una vaina fue encontrada dentro del cuerpo.

El cuerpo de Camargo fue hallado a la vera de la ruta 14, en el paraje Gentile, con signos de violencia y múltiples orificios de bala en la cabeza. Inicialmente, se pensó que podría ser un accidente vial, pero esta hipótesis fue descartada tras los primeros informes policiales.

El caso de Camargo tiene antecedentes trágicos: en diciembre de 2022, su hermano, un cambista informal, fue víctima de un atentado en el que falleció su esposa, Carla Betiana De Olivera, de 37 años. Todo indica que el crimen de Camargo podría estar relacionado con el comercio informal y el contrabando en la zona de frontera, siendo posiblemente un ajuste de cuentas.

El juez de Instrucción de San Pedro, Ariel Belda Palomar, ordenó la detención del sospechoso y continuará con las indagaciones y declaraciones testimoniales en los próximos días.