"La difícil situación económica del país ha afectado de manera significativa nuestros ingresos, y es esencial que se realice un ajuste. En la provincia, se ha establecido un salario mínimo que se acerca al costo de la canasta básica, y consideramos que nuestro municipio debe reconsiderar nuestros salarios para acercarnos a ese estándar".

En cuanto a las posibles medidas de fuerza, Schnauder señaló que aunque se ha propuesto la idea de bloquear rutas, la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) no está de acuerdo con esta estrategia, ya que considera que violaría la ley. El delegado subrayó que su objetivo principal es fomentar el diálogo entre ambas partes.

En cuanto a la inquietud por la posible pérdida de empleos temporales, Schnauder explicó que están solicitando el veto total del artículo 6 de la ordenanza de Ampliación Presupuestaria, que impide el gasto de fondos y, en consecuencia, conduce a la cancelación de contratos de empleados. temporales. "Existe una disputa política entre el Ejecutivo y el Legislativo, y quienes quedan atrapados en esta situación son los trabajadores", afirmó Schnauder.

El delegado gremial también informó que se mantendrán en estado de asamblea permanente y que el cuerpo de delegados se reunirá en las próximas horas para determinar las medidas a seguir y comunicarlas a los trabajadores. La tensión persiste en el ámbito municipal mientras las partes buscan una solución que beneficie a los empleados municipales.